La plataforma web de la Clínica Mayo elaboró una extensa lista de los remedios que funcionan y los que no para curar el resfriado. En ella incluyó algunos que hasta son capaces de producir daño. En esta época del año, en que las temperaturas descienden y las bacterias proliferan en los espacios cerrados, es útil tenerla en cuenta.

Qué conviene comer y beber cuando estás engripado o resfriado

En principio, Clínica Mayo postula que no existe aún una cura definitiva para el resfrío común, sino algunas técnicas que sirven para aliviarlo. El resfrío –o resfriado común– se caracteriza por afectar las vías respiratorias superiores, es decir, la nariz y la parte alta de la garganta. El síntoma característico es la mucosidad acuosa que puede producir sensación de fiebre localizada y dolor de cabeza.

Remedios para el resfrío que funcionan

Para aliviar los síntomas, sirve beber mucho líquido tanto tibio o a temperatura ambiente como caliente. El agua con limón y miel pueden aflojar la confesión nasal. Es un hábito que ayuda a revertir la deshidratación ocasionada por la pérdida excesiva de líquido. La sopa, los caldos y los tés también alivian los síntomas.

Retomando la miel como ingrediente paliativo, esta se puede agregar a la leche o el té caliente. Pero está contraindicada para niños menores de un año. A partir de esta edad ya pueden consumirla hasta cualquier edad. Las personas con diabetes deben tener especial cuidado con este ingrediente porque, aunque alivia la pesadez en la garganta, puede incrementar el nivel de glucosa.

Otro preparado casero para aliviar la congestión son las soluciones salinas. Agregar unas gotas en cada orificio nasal sirve para destapar las vías respiratorias. Se puede usar en niños de corta edad, siempre consultando con un especialista.

Remedios para el resfrío que no funcionan

La Clínica Mayo hace una división entre dos grupos de medicamentos que se utilizan y que no son tan efectivos como se cree.

En primer lugar, los antibióticos son los que se cree falsamente que alivian los síntomas. Pero la realidad es que están diseñados para combatir bacterias y no virus que son los que provocan los resfriados. No habrá una mejoría por utilizar de emergencia cualquier antibiótico que haya en casa y, si produce algún avance, es probable que a la larga de un efecto rebote.

El otro grupo está constituido por el grupo de medicamentos para resfrío y para tos recetados a niños. Los medicamentos de venta libre no son recomendados para niños menores de cuatro años a menos que lo haya supervisado un médico. De lo contrario, pueden tener efectos secundarios.